El mercado de la Cascaruja, que desde el pasado viernes hasta el próximo 27 de diciembre, se instala en la plaza del Ayuntamiento, ofrece desde ayer a los visitantes un curioso abeto de Navidad, esculpido en hielo por Andrés Raya. Toda una obra de arte que acompaña a un mercado "de los de antaño", como indicó la concejala de Fiestas en la presentación del tradicional espacio navideño.
La plaza del Ayuntamiento acoge, por tanto, una zona ambientada con los tradicionales villancicos y decorada con motivos propios de estas fechas, además de dar cabida a treinta puestos de turrones, dulces, panderetas, zambombas, abetos y plantas de Navidad. Además, el mercado de la Cascaruja ofrece todos los días animación infantil de teatro de guiñol, de 11 a 13.30 y de 17.30 a 19 horas. Además, músicos ambulantes con dolçaines i tabalets.
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